Si yo hubiera aprendido
que volar también es posible sin alas
y que hay estrellas que nacen de los besos.
Si tú te hubieras quedado,
te juro que no estaría ahorita traduciendo
todos los silencios.
Si hubiéramos aprendido juntos
que soñar también se puede sin dormir
y nos hubiéramos quedado mirando a los ojos
aquella madrugada,
en lugar de habernos despedido tan rápido.
Te prometo que no estarías tan lejos de nosotros,
ni yo tan cerca de mí,
en este lugar al que le sobra tanto espacio
y le faltas tú.
No te confundas,
yo sé que nací para morir,
como todos.
Pero ahora sólo me matas tú,
como a nadie.
Si te hubieras guardado los pretextos
y hubieras sido un poco más valiente.
Si yo hubiera dejado mi orgullo
y hubiera puesto más de mi parte,
esta historia no sería tan triste.
Pero no fue así.
Hoy sólo nos queda suponer
y vivir de los "quizás",
aunque yo no entienda lo que pasa
y tú ya no sepas cómo regresar.
— m.f. // Quizás
Mariana me encanta todo lo que escribes, tienes mucho talento! Te amo tanto...pero tanto... Mamá
ResponderEliminar